por Raro /
Continuando con la serie de análisis “Raro”, hoy toca hacer la cata de Cannatonic #2, una variedad creada por el equipo de Resin Seeds, encabezado por Jaime, consiguiendo ser la primera variedad española en ganar la copa holandesa High Times Cup Championship, gracias a sus altos contenidos en THC y CBD, y como no, a sus grandes propiedades organolépticas.
Cannatonic #2 cultivada por Xosé
Lo primero que quiero destacar es su peculiar olor a Kush, que rápidamente ha conseguido crearme un interés extra sobre este fenotipo, nada más abrir el tarro de cristal, ya que confieso ser un “fan” incondicional de las variedades Kush. En cambio, al grindar las flores ha desprendido un olor más característico de las variedades Haze, otorgándole una multitud de matices, predominando entre ellos sobre todo el olor a pino.
En cuanto al sabor este fenotipo, demostrando una vez más su complejidad, tiene un marcado sabor a madera, el cual me ha recordado a las típicas plantas curadas y almacenadas en cajas de madera, un toque muy particular y muy valorado por los consumidores “Old School” , ya que este no es fruto de un peculiar secado, sino de las propiedades organolépticas de esta singular genética.
Cannatonic #2 cultivada por Xosé
Analizando el efecto, gracias a su ratio 1:1 de CBD y THC, causa una sensación muy compensada, consiguiendo abstraerte durante unos minutos de todo lo que rondaba en tu cabeza, evitando así los típicos ataques de ansiedad producidos por el estrés, siendo muy recomendable dicho fenotipo para controlar este tipo de dolencias. Otro efecto que tengo que destacar, es que tras vaporizar una dosis de esta hierba, rápidamente me ha entrado hambre, algo que no me sucedía hacía muchos años, por lo que recomiendo este fenotipo para consumidores medicinales con problemas de apetito, como podrían ser los pacientes que están recibiendo quimioterapia.
En cambio, por otro lado, aunque pueda parecer paradójico, no la recomiendo si tras consumirla tenemos que concentrarnos en algo, como escribir, leer o pintar, ya que al abstraernos de todo también nos dificulta la concentración y la creatividad, al menos en mi caso, ya que cada consumidor es un mundo, y sólo uno mismo y a base de probar genéticas, conseguirá encontrar la idónea para conseguir el efecto buscado, ya sea medicinal o lúdico.
¡Yo Vaporizo!
